Otro Sant Jordi impresionante. La repetición del éxito no le quita ni un solo gramo de emoción. Ya llevamos unos cuantos, vale, pero siempre parece el primero y el mejor. La parte más vanidosa (que todos tenemos) nos hace sentir muy bien, sabiendo que hemos sido los más vendidos. Pero yo pienso que a los del Terrat -que nos ganamos la vida haciendo televisión- nos hace más felices la respuesta masiva de la gente. Las colas llenas de seguidores cargados de paciencia, buenas palabras y muchas más sensaciones que ahora mismo ni tan siquiera podría resumir. Eso es lo mejor: avalancha de complicidad.
Hoy, es justo agradecer a todo el equipo que ha participado en el Sant Jordi 2004, que son muchos, y pedir disculpas a todos aquellos a quien no pudimos atender, que son más. En días como estos, nuestro trabajo semanal (duro y exigente) queda plenamente justificado.Un abrazo a todos, de todo corazón.
Gracias.