Ya está, ¿no?

Miércoles, 25 de agosto de 2004

La casitaLas vacaciones se tienen que terminar en algún momento. Si durasen una semana más, nos volveríamos irrecuperables para la vida normal. Está todo calculado. Lo que no entiendo es la gente que se vuelve hiperactiva durante la época de descanso. Este verano mucha gente me preguntaba: ¿Y qué harás? Y yo siempre decía lo mismo: «Nada. Nada de nada de nada». La inactividad continúa estando muy mal vista: «Pero ¿te encuentras bien?». Claro que me encuentro bien. Por eso no quiero hacer nada más, que es el estado natural del ser humano desde que se inventaron los supermercados y no hace falta salir a cazar.

La parsimonia me ha permitido tumbarme en un sofá y tragarme la primera temporada de los Soprano. Sensacional. He leído demasiado, he bebido poco y lo he dormido todo. De vez en cuando, echaba un vistazo a la tele y confirmaba que somos autodestructivos por naturaleza. Si no es así, no se explica como se ha puesto lo del corazón. Ni cuando te mueres te dejan tranquilo. Ahora que hablo de la tele, no hay día que no me pregunten qué haremos la temporada que viene. Me lo han preguntado en Alicante, en Menorca, en Reus, en Madrid, en Barcelona….

Finalmente encontré una casita donde se estaba muy tranquilo y a gusto. Acompaño foto.